La entrada más vista de este blog corresponde a una redacción que realizó una alumna el curso pasado sobre la esclavitud, escrito con gran madurez y seriedad. Todas las personas que nos dedicamos a la enseñaza valoramos muy positivamente el encontrar alumnos trabajadores, comprometidos con su proyecto de vida y que sean capaces de pensar con autonomía, y pensamos que la educación los hará ir creciendo cada vez más para ser las personas que tendrán que hacer moverse al mundo dentro de unos pocos años.
Pero, en la actualidad nos encontramos con que no podemos asegurar que estos alumnos puedan llegar a conseguirlo, por el simple hecho de que la situación económica no se lo permite y que las becas con las que pudieran contar se reparten de forma cicatera.
¿Es lógico que alumnos excelentes no tengan oportunidad de desarrollar todo su talento y potencialidades porque no cuentan con medios económicos para ello?¿Qué medios está poniendo el Estado para que toda esta capacidad no se pierda por tener que trabajar en trabajos basura, ya que la educación le estaría vetada por no tener medios para pagar los libros de texto?
Os invito a leer una carta que la misma alumna que escribió el Ensayo sobre la Esclavitud de este blog ha hecho sobre una situación personal que la ha llevado a reflexionar acerca de la Educación y la igualdad de oportunidades.
LA EDUCACIÓN*
EN ESPAÑA
Lo que está escrito lo he realizado con la finalidad de desahogarme
y quedarme satisfecha conmigo misma.
Soy una alumna de 1º Bach. Con una media de sobresaliente. Cabe
destacar que el año pasado aprobé todo con un 10. Siempre he dado más prioridad
a estudiar y hacer mis deberes que a salir con mis amigos a cenar, al cine, a
la discoteca…con un objetivo muy claro: poder sacar una carrera y realizarme
como persona.
El curso pasado, al igual que la mayoría de mis compañeros
de clase, me presenté para la convocatoria de becas del Ministerio de Educación.
El requisito era tener una media superior a 5,5 (nota que supero con creces…) y,
después, según tu situación familiar te concederían o no una determinada
cantidad de dinero. Ahí es donde viene mi conflicto. Viniendo de un pueblo
pequeño, conozco casos de estudiantes cuyas notas son bastante bajas y cuya
situación familiar no es mucho peor que la mía, a los cuales les han concedido becas de hasta 1500€
cuando la mía es tan solo de 200€ (ni siquiera me ha alcanzado para poder pagarme los libros de texto), algo que me parece
indignante, pues mientras yo me he dedicado a mis estudios, muchas de esas
personas han estado de fiesta y de botellón todos los fines de semana.
Al conocer el resultado, fui a la delegación del Ministerio
de Educación en Alicante. Cuál fue mi sorpresa cuando me enviaron de un
departamento a otro, incluso pedí hablar con el inspector de educación, y su
secretaria me dijo que no estaba, siendo esto mentira, pues al final me
encontré con él por el pasillo y hablamos. De todas formas, ninguno me aportó soluciones,
solo me decían que la renta de mi familia superaba lo fijado, hecho que me
impactó bastante, pues en mi casa solo entra un sueldo y no es una gran
cantidad, las rentas de mi familia en el 2013 son inferiores al salario mínimo.
Esta situación me ha hecho abrir los ojos acerca de la
realidad en España, cómo esta se conforma con la simple MEDIOCRIDAD, algo que
podemos comprobar con todas esas noticias acerca de incompetentes, que no hacen
otra cosa que meter la pata en sus trabajos. Claro caso es el de esos
científicos que confundieron huesos humanos con huesos de animales ¿Dónde está
la seriedad y profesionalidad ahí?
Está bien que se ayude a estudiantes con familias numerosas
o situaciones difíciles, pero también pienso que un estudiante tiene que
dedicarse a ESTUDIAR, a sacar buenas calificaciones, al igual que un trabajador
si quiere un salario más alto y ascender en su puesto debe echar horas extras. Por tanto, desde mi punto de vista, es muy
injusto que a alguien que se esfuerza lo
mínimo le concedan más dinero que a una persona que se dedica a sacar grandes
calificaciones. Le peor de todo es que probablemente mi caso no haya sido el
único… Eso sí, hay algo que tengo muy claro, no voy a bajar mi media, pienso
seguir esforzándome en lo que respecta a mis estudios porque si no, me
decepcionaría a mí misma y eso no lo voy a permitir. Pero yo ahora me planteo:
¿Para que voy a trabajar
el día de mañana en un Estado que no invierte en mí?